Es de noche ya, el silencio ocupa
un papel importante en esta ocasión.
Mi mano temblorosa, escribe
estas líneas, mientras mis ojos;
se pierden en un punto vacío.
Recuerdos, aparecen en mi memoria
escenas de una figura que aún no muere,
el tintero se ha derramado sobre el papel;
ahogando la inspiración que se apodera
de mi mente en este instante.
Las paredes de la habitación se burlan
se ríen de mí, el baúl del pasado se abre;
dejándo salir los pocos momentos felices
que atesoraba, que no dejaba escapar,
que los guardaba celosamente para mí.
Todos ellos se sientan a mi lado,
tratando de hacerme sonreír.
Pero sin lograrlo, puedo escucharlos,
pero mi mente que divaga en el espacio,
se encuentra ahora a tu lado.
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